Huir, olvidar, observando como aparentemente intacta, los rayos atraviesan como heridas la urbe, despierta e intenta recordar el poder de la naturaleza, todo cambia, pero siempre llegará un día, el día de la restauración.
domingo, 8 de marzo de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Me gustaron los rayitos de luz que se ven.
ResponderEliminar